Creada como respaldo del bitcoin, la tecnología blockchain que se encuentra detrás de esta moneda virtual es una fuerza disruptiva para muchos modelos de negocio existentes. Blockchain, un registro distribuido, abierto y seguro que recoge las transacciones entre dos partes de forma eficiente y permanente, está empezando a utilizarse en una amplia gama de sectores, desde la financiación del comercio hasta la abogacía.
¿Por qué invertir en criptomonedas?
Las criptomonedas prometen una nueva forma de llegar a un consenso global; un modelo basado en las matemáticas que puede garantizar la escasez al tiempo que permanece abierto a cualquier persona con conexión a Internet. Bitcoin, la más conocida, se considera un depósito de valor en una era de incertidumbre, una especie de oro digital. Al igual que el oro, su suministro es limitado. Nunca habrá más de 21 millones de Bitcoins y se emitirán a un ritmo conocido. Esto contrasta con las monedas fiduciarias, en las que el aumento de la oferta monetaria puede avivar la inflación y devaluar la moneda.
El valor de las criptomonedas más recientes -como Ethereum, Tron y Solana- está vinculado a su rápido crecimiento como plataformas para contratos inteligentes.
En términos generales, la inversión en criptomonedas ofrece diversificación con respecto a las clases de activos tradicionales, ya que sus precios tienden a moverse de forma independiente.
Sin embargo, los precios de las criptomonedas son volátiles y están sujetos a rápidas oscilaciones. Debido a ello y a los demás riesgos que llevan aparejados, solo deberían formar una parte limitada de la cartera global de un inversor.
¿Qué es una criptomoneda?
Las criptomonedas son un medio de intercambio digital que utiliza la criptografía para su seguridad (1). Se representan como fichas o entradas del libro mayor en una red blockchain, y se utilizan para medir la capacidad de la red para realizar transacciones (2).
Un hecho que suele confundir es que los nombres de las redes de criptomonedas se utilizan indistintamente con los nombres de los tokens que, técnicamente hablando, son las monedas (3). Tres ejemplos destacados de criptomonedas son:
- Bitcoin (la red) tiene BTC como token.
- Ethereum (la red) tiene Ether como token.
- Solana (la red) tiene SOL como token.
La demanda de una criptomoneda concreta aumenta cuanto más se utiliza su correspondiente red de cadena de bloques. Una mayor demanda del token puede hacer aumentar su precio.
Tipos de criptomonedas
Aunque el universo de las criptomonedas evoluciona rápidamente, VanEck ha identificado las siguientes clasificaciones generales:
Diseñado para mantener o aumentar el poder adquisitivo a lo largo del tiempo. Por ejemplo, bitcoin.
Protocolo blockchain diseñado para alojar diversas dApps propias y de terceros. Por ejemplo, Ethereum, Solana, TRON, Polkadot.
Programa informático descentralizado diseñado para realizar tareas específicas. Por ejemplo, Polygon.
Monedas digitales que intentan vincularse a un activo razonablemente estable, como una moneda o una materia prima. Por ejemplo, Tether.
Tokens propiedad de una bolsa de criptomonedas centralizada y gestionados por ella. Por ejemplo, BNB (Binance Exchange).
Dinero digital operado por una red distribuida. Por ejemplo, Dogecoin.
Servicios financieros construidos sobre redes distribuidas sin intermediarios centrales. Por ejemplo, Uniswap.
Moneda utilizada para recompensar a los usuarios por contenidos, juegos, apuestas o redes sociales. Por ejemplo, Axie Infinity.
¿Qué es staking?
El staking de criptomonedas es un proceso que implica comprometer los propios criptoactivos con una red blockchain durante un tiempo determinado para ayudar a la red a confirmar las transacciones. El staking puede ser una buena forma de utilizar los criptoactivos para generar ingresos, puesto que algunas criptomonedas pagan elevados tipos de interés por dicho compromiso.
La mejor criptodivisa para invertir
La elección de la moneda en la que invertir depende de cada inversor. Obviamente, cambiará en distintos momentos y la volatilidad de los precios a corto plazo suele depender de los cambios en la cuota de mercado o el impulso.
Bitcoin es el punto de partida para muchos inversores porque su caso de uso es sencillo, su red es una de las más descentralizadas y el impulso de su precio a largo plazo ha sido fuerte. Muchos inversores profesionales, grandes empresas e incluso una nación soberana (El Salvador) han invertido en esta original criptodivisa.
Sin embargo, con frecuencia conviene diversificar o repartir las inversiones. Aunque Bitcoin fue la primera criptomoneda, las más recientes ofrecen casos de uso diferentes. De hecho, criptomonedas de segunda o tercera generación como Ethereum y Solana están respaldadas por tecnología más avanzada, lo que puede impulsar la demanda de capacidad de red y sus tokens.
Es difícil predecir cuáles serán las criptomonedas dominantes dentro de 20 años. Por ese motivo, puede ser inteligente invertir en una cesta de criptomonedas. Los inversores siempre deben tener en cuenta los riesgos cuando invierten en criptomonedas.
Invertir en criptomonedas
Invertir directamente en criptomonedas está plagado de dificultades y riesgos. Se necesita conservar una clave privada para un monedero de criptomonedas. Pero existen muchos casos de pérdida de claves si se conservan directamente o de claves pirateadas si se conservan en una bolsa (1).
Es mucho más sencillo y seguro invertir en criptomonedas a través de una nota cotizada en bolsa (ETN). Las criptomonedas que respaldan estas ETN son almacenadas por custodios profesionales regulados (2).
Construya su cartera de activos digitales con VanEck
VanEck ofrece varios ETN de criptomonedas que le ayudan a construir una cartera diversa invirtiendo en criptoactivos. Puede tener acceso directo a una amplia gama de criptomonedas, fácilmente negociables y completamente respaldadas por su criptomoneda subyacente. Explore nuestra gama de criptoactivos y empiece a crear su cartera de criptoactivos:
- Teléfono: +34 (91) 320 00 47
- Correo electrónico: EMEAinfo@vaneck.com