Los valores de las empresas más pequeñas pueden ser más volátiles y menos líquidos que los valores de las grandes empresas. Las empresas más pequeñas, en comparación con las grandes, pueden tener un historial de operaciones más corto, menos recursos financieros, menos fuerza competitiva, pueden tener una línea de productos menos diversificada, pueden ser más susceptibles a la presión del mercado y pueden tener un mercado más pequeño para sus valores. Este es uno de los factores a tener en cuenta a la hora de considerar una inversión en un fondo de oro.

Las empresas dedicadas a la producción y distribución de materiales básicos pueden verse afectadas negativamente por los cambios en los acontecimientos mundiales, las condiciones políticas y económicas, la conservación de la energía, las políticas medioambientales, la volatilidad de los precios de los productos básicos, las variaciones de los tipos de cambio, la imposición de controles a la importación, el aumento de la competencia, el agotamiento de los recursos y las relaciones laborales. Este es un factor de riesgo de un ETF de oro.

El valor de las inversiones y los ingresos procedentes de las mismas, y por tanto el valor y los ingresos de las acciones pueden bajar tanto como subir y un inversor puede no recuperar la cantidad invertida. La exposición de los ETF se basa en el rendimiento de los valores del índice que, a su vez, está expuesto a los movimientos generales del mercado (tanto negativos como positivos). Los precios de los valores de un determinado ETF Oro están sujetos a los riesgos asociados a la inversión en el mercado de valores, incluidas las condiciones económicas generales y las caídas de valor repentinas e imprevisibles.