Cómo navegar por la creciente ola de la ansiedad ante la jubilación
Ayude a sus clientes a navegar por la tormenta de la ansiedad ante la jubilación con este enfoque de cuatro pasos para planificar con éxito esta etapa de la vida.
La generación del baby boom está entrando en masa en "La Gran Jubilación", lo que hace que la planificación de esta etapa sea una prioridad para los asesores financieros. No obstante, la encuesta de Advisor Authority realizada por el Retirement Institute de Nationwide1 mostró que las turbulencias económicas han hecho que los inversionistas sientan ansiedad por su futura seguridad financiera. Más de la mitad de los inversionistas no jubilados admiten estar preocupados por su futuro financiero y el 43 % de los encuestados afirman revisar los saldos de sus cuentas de jubilación varias veces a la semana. Las mujeres son más propensas a verificar sus saldos con frecuencia (53 %) que los hombres (34 %). Sin embargo, es más probable que los hombres estén nerviosos por su futuro financiero tras la jubilación (55 % frente a 49 %).
Los asesores también sienten la presión de sus clientes, ya que el 34 % afirma que muchos de ellos están cancelando o retrasando su jubilación. Entonces, ¿cómo pueden los asesores reducir toda esta ansiedad de los clientes?
En primer lugar, es crucial recordar a los clientes que invertir con éxito es un juego a largo plazo. Por supuesto, es más fácil decirlo que hacerlo. Utilice las siguientes estrategias para mantener a los clientes tranquilos, interesados en los mercados y centrados en sus objetivos de inversión a largo plazo, incluso durante los periodos de turbulencias del mercado.
1. Establezca expectativas claras y realistas
Es primordial establecer expectativas adecuadas desde el principio. Al educar a los clientes sobre la naturaleza de la volatilidad del mercado y el potencial de las fluctuaciones a corto plazo, podemos ayudarles a desarrollar una perspectiva realista. Fomentar un horizonte de inversión a largo plazo permite a los clientes centrarse en el panorama general y no dejarse atrapar por el ruido del mercado a corto plazo.
Los asesores deben realizar un plan financiero completo y un análisis de tolerancia al riesgo para comprender los objetivos, los objetos y el horizonte temporal de sus clientes. Esto también ayudará a sus clientes a evaluar sus gastos previstos durante la jubilación y a crear un presupuesto que refleje dichos gastos. Trabajar juntos para comprender de dónde procederán los ingresos una vez que dejen de llegar los cheques de la nómina y abordar las probabilidades de éxito para no quedarse sin dinero. Ayudar a los clientes a entender el tratamiento fiscal de las diferentes fuentes de ingresos también desempeñará un papel importante en el desarrollo de un plan de jubilación exitoso.
2. Haga hincapié en la importancia de la diversificación y la asignación estratégica de activos
La diversificación es la base de una cartera de inversión sólida. Al repartir las inversiones entre distintas clases de activos, geografías y sectores, podemos mitigar el riesgo y aumentar la probabilidad de obtener rendimientos positivos a lo largo del tiempo. Educar a los clientes sobre las ventajas de la diversificación puede infundirles confianza en su estrategia de inversión, incluso en momentos de turbulencia en los mercados.
La gestión de las inversiones es fundamental para ayudar a los clientes a alcanzar sus objetivos de jubilación y a seguir el ritmo de la inflación. Un enfoque basado en "cubetas de dinero" puede ayudar a los clientes a comprender el diferente riesgo y potencial de volatilidad de las distintas inversiones de su cartera. Por ejemplo, el dinero para pagar gastos a corto plazo se mantiene en una inversión conservadora que paga intereses y no debería experimentar demasiada volatilidad independientemente de lo que haga el mercado. En cambio, el dinero que no se necesita hasta dentro de 10 años o más puede soportar más volatilidad y debe dejarse tranquilo para que crezca con el tiempo.
3. Enfóquese en los objetivos, no en los resultados del mercado
La comunicación abierta y transparente es vital en tiempos turbulentos. Informar periódicamente a los clientes sobre la evolución de los mercados, explicarles los motivos de las decisiones de inversión y facilitarles la comprensión puede ayudarles a aliviar la ansiedad. Es fundamental dejar de enfocarse en las fluctuaciones diarias del mercado y centrarse en los objetivos a largo plazo de los clientes. Al alinear las estrategias de inversión con sus objetivos individuales de jubilación, los asesores recuerdan a los clientes que la volatilidad a corto plazo del mercado es solo un desvío temporal en su camino hacia la consecución de sus sueños.
No tenga miedo de compartir la perspectiva histórica. Recordar a los clientes las caídas del mercado en el pasado y las recuperaciones posteriores puede ayudarles a poner en perspectiva la volatilidad actual del mercado. Al destacar la resiliencia de los mercados en el largo plazo, los asesores pueden inspirar confianza a los clientes y evitar que tomen decisiones impulsivas que puedan perjudicar sus objetivos de jubilación.
4. Pruebas de estrés de los planes de inversión
Durante los periodos de volatilidad del mercado, las pruebas de estrés de los planes de inversión pueden proporcionar a los clientes una sensación de seguridad. Al analizar cómo se habrían comportado sus carteras durante anteriores caídas del mercado y hacer hincapié en la resiliencia de sus participaciones diversificadas, los asesores pueden tranquilizar a los clientes asegurándoles que sus inversiones están diseñadas para capear el temporal.
Independientemente de las condiciones del mercado, los asesores deben fomentar las revisiones periódicas de las carteras. Las revisiones periódicas de la cartera tienen múltiples propósitos. Ofrecen la oportunidad de reevaluar los objetivos de inversión, realizar los ajustes necesarios y reequilibrar las carteras. Además, estas revisiones permiten a los asesores recordar a los clientes su progreso hacia la jubilación y reforzar la importancia de mantener el rumbo durante la volatilidad del mercado.
Junto a estos cuatro pasos, los asesores deben mantenerse al tanto de la legislación relacionada con la planificación de la jubilación, que evoluciona de manera constante.
Recuerde que el papel de un asesor financiero va más allá de la gestión de inversiones. Durante los periodos de volatilidad de los mercados, los asesores demuestran su valor al mantener a los clientes tranquilos, atentos a sus objetivos a largo plazo y con inversiones en los mercados. Al establecer expectativas claras, hacer hincapié en la diversificación, mantener una comunicación abierta y subrayar la importancia de mantener el rumbo, los asesores pueden guiar a los clientes en tiempos turbulentos y ayudarles a alcanzar sus aspiraciones de jubilación. Invertir con éxito es un auténtico viaje y, con la orientación adecuada, los clientes pueden resistir cualquier adversidad y hacerse más fuertes a largo plazo.